Salinas de Cerrillos
Las Salinas de Cerrillos, ubicadas en el Paraje Natural de Punta Entinas-Sabinar y declaradas Reserva Natural, Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y humedal de importancia internacional según los criterios del Convenio de Ramsar, son hoy un lugar ornitológico de primer orden, donde flamencos, cigüeñuelas, avocetas y otras especies de aves acuáticas se refugian durante los meses fríos para alimentarse y descansar.
Las Salinas de Cerrillos, también conocidas como Salinas de Poniente, son hoy una laguna que refleja siglos de explotación y producción de sal ininterrumpida. Aunque sus orígenes no son certeros, se cree que estas salinas se han utilizado para extraer sal del mar desde la época romana y árabe, aunque hay quien remonta el origen a la etapa fenicia. Este territorio ha evolucionado hasta convertirse en el entramado de estanques, compuertas y canales que vemos hoy. A principios del siglo XX, experimentaron una importante transformación con la construcción de cristalizadores industriales, marcando una nueva fase en su historia.
Aunque la actividad salinera cesó a finales de los años 80, este paraje conserva un valor ecológico importante debido a que los antiguos estanques que son ahora un humedal costero que atrae a una notable diversidad de aves. Desde aquí se pueden recorrer senderos que serpentean entre las antiguas balsas y ofrecen una oportunidad única para la observación de estas aves en su hábitat natural.